La falta de acción frente al cambio climático está exponiendo a las empresas a riesgos crecientes que amenazan sus ganancias, operaciones y viabilidad a largo plazo. Un reciente informe del Foro Económico Mundial y Boston Consulting Group (BCG), titulado The Cost of Inaction: A CEO Guide to Navigating Climate Risk (“El costo de la inacción: una guía para CEOs sobre cómo navegar el riesgo climático”), pone en perspectiva las consecuencias de no tomar medidas.
Riesgos climáticos: impacto en los resultados financieros
Según el informe, los riesgos físicos individuales del cambio climático podrían poner entre un 5% y un 25% del EBITDA proyectado para 2050 en riesgo, dependiendo del sector y la ubicación geográfica de las empresas. Esto se suma a otros factores como la desaceleración del PIB, que afecta el consumo y el crecimiento.
En un escenario de acción climática acelerada, donde se persiga un camino hacia “cero emisiones netas a 1.5 °C”, los costos asociados al precio del carbono podrían alcanzar hasta un 50% del EBITDA en los sectores más intensivos en emisiones para 2030. Además, entre un 10% y un 35% del valor contable de los activos grises podrían enfrentar devaluaciones para el mismo año.
El caso empresarial para la acción climática
A pesar de los riesgos, el informe destaca un caso empresarial claro para invertir en acción climática. Las inversiones globales en mitigación del cambio climático podrían generar beneficios hasta cinco veces superiores. Se necesitaría invertir alrededor del 2% del PIB global acumulado en medidas de mitigación para mantener el calentamiento por debajo de los 2 °C, junto con un 1% adicional para adaptarse al calentamiento ya inevitable. Estas inversiones podrían prevenir pérdidas del 10% al 15% en el PIB global durante este siglo.
A nivel corporativo, las empresas que evalúan de manera integral su exposición al riesgo han informado que sus inversiones en adaptación y resiliencia podrían generar entre 2 y 19 dólares por cada dólar invertido. Además, las inversiones en descarbonización también generan beneficios financieros, como un menor gasto en energía fósil y un perfil de riesgo reducido.
Mercados en crecimiento y oportunidades tecnológicas
El mercado de tecnologías verdes también ofrece una ventaja competitiva significativa. Se proyecta que este mercado alcanzará los 14 billones de dólares para 2030, con sectores como la energía alternativa, el transporte sostenible y los productos de consumo sostenibles creciendo a tasas del 10% al 20% anual, muy por encima del crecimiento del PIB.
Transformar el riesgo en oportunidad
“Los riesgos climáticos están escalando y la ventana para actuar se está cerrando rápidamente”, afirmó Pedro Gómez, Jefe de Clima del Foro Económico Mundial. El informe subraya que abordar estos desafíos no solo protege a las empresas de la disrupción, sino que también les permite aprovechar oportunidades transformadoras.
Para integrar el riesgo climático en sus estrategias, el informe recomienda a las empresas realizar evaluaciones completas de riesgo, gestionar inversiones en adaptación y descarbonización, y pivotar hacia soluciones sostenibles y resilientes.
En este contexto, el cambio climático no solo representa una amenaza, sino también una oportunidad para innovar, aumentar la competitividad y fomentar una prosperidad compartida.