El gobierno danés, el mayor productor de petróleo de la Unión Europea, anunció que prohibirá nuevas licencias de exploración y producción en las aguas danesas del Mar del Norte y que ha puesto una prohibición total a toda la producción de petróleo para el 2050. Así, se convierte en la primera gran nación productora de petróleo en poner una fecha límite a las actividades de exploración y producción.
Esto viene después de que un informe respaldado por la ONU, publicado a principios de esta semana, reveló que la producción mundial de combustibles fósiles no está ni cerca de los niveles que son consistentes con el mantenimiento del calentamiento global a 1,5°C para 2050. El Reino Unido y Noruega, vecinos del Mar del Norte de Dinamarca, fueron citados como países que necesitan desacelerar la producción rápidamente para alcanzar el alineamiento con el Acuerdo de París.
El mar del Norte es un mar del océano Atlántico, de 750 000 km2, una longitud aproximada de 960 km y una anchura máxima de 480 km, entre las costas de Noruega y Dinamarca. Es muy profundo, una media de 95 metros, con mareas bastante irregulares. Hay mucha lluvia y niebla durante todo el año. Tiene importantes yacimientos de petróleo y gas natural, que se explotan desde los años 1970. En 2017, la Agencia Danesa de Energía indicó su decisión de comenzar a reducir su producción de petróleo. Ahora acaba de subir la apuesta. “Ponemos un punto final a la era fósil y fijamos una línea entre nuestras actividades en el mar del Norte y el objetivo de la ley climática (aprobada en 2019) de alcanzar la neutralidad en emisiones en 2050”, señaló en un comunicado el ministro de Energía, Dan Jorgensen.
Las nuevas caídas en 2016 y el inicio de la pandemia de coronavirus han desencadenado ejercicios de ahorro de costos, y el número de personas que trabajan en alta mar en el Mar del Norte se redujo en más de un tercio al comienzo del inicio del coronavirus en marzo. Ha habido una continua presión pública en el Reino Unido para que se produzca una transición que permita dejar de utilizar el petróleo del Mar del Norte y pasar a inversiones en energía más ecológica. Dinamarca ha estado mucho tiempo por delante de sus vecinos en este sentido, con sus inversiones en energía eólica marina y sus compromisos de reducir las emisiones de carbono en un 70% para 2030.
Junto con el anuncio, Dinamarca canceló su octava ronda de concesión de licencias offshore después de un débil interés del mercado y la retirada de la mayor empresa francesa Total, de la ronda.