Desmantelar la accidentada central nuclear de Fukushima, en Japón, significará invertir más de 2 billones de yenes (es decir, 19.153 millones de dólares), según una proyección del Ministerio de Industria nipón.
El nuevo cálculo sobrepasa lo estimado inicialmente por la empresa operadora de la planta, Tokyo Electric Power (TEPCO), que proyecta que los gastos superarán los 80.000 millones de yenes (766 millones de dólares) anuales a lo largo de los más de 30 años que demandará el desmantelamiento.
El Ministerio japonés de Economía, Comercio e Industria presentó esta nueva estimación en la reunión de un comité de expertos establecido para reformar la gestión de TEPCO, intervenida por el Estado desde julio de 2012, y ayudar a financiar las operaciones de desmantelamiento.
La central atómica de Fukushima Daiichi resultó duramente golpeada por un terremoto de 9 grados Richter y un posterior tsunami el 11 de marzo de 2011. Como consecuencia de este incidente, el más grave desde Chernobyl, los tres reactores que estaban operativos en ese momento sufrieron fusiones debido a la pérdida de refrigeración.