Un grupo internacional de investigadores halló cadenas montañosas y una serie de enormes cañones enterrados bajo el hielo cerca del Polo Sur, en la zona occidental de la Antártida, en un hallazgo que podría derivar en grandes implicaciones ambientales.
Concretamente, se trata de tres cañones. El más grande fue llamado Foundation Trough, y tiene más de 350 kilómetros de largo y 35 kilómetros de ancho. El hallazgo se enmarca en el proyecto PolarGAP, que está financiado por la Agencia Espacial Europea y destinado al estudio de la geología y geofísica del Polo Sur.
De acuerdo con los investigadores, si los cañones son grandes, también lo pueden ser sus posibles implicaciones ambientales: si la capa de hielo polar se debilita debido al calentamiento global, el tamaño y la orientación de los cañones podría acelerar la velocidad a la que fluye el hielo desde el centro del continente hacia el mar, lo que elevaría los niveles del agua y posiblemente provocaría la inundación de zonas costeras de todo el mundo.