Un mayor número de conflictos y el cambio climático motivaron el brusco aumento del hambre en el mundo, tras una década de retroceso casi constante, según indicó la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
A través de un flamante informe, la entidad precisó que el año pasado el hambre afectó a 815 millones de personas (un 11% de la población global). Esta cifra supera por 38 millones a la registrada en 2015.
La ONU manifestó que este incremento se debe en gran parte a la proliferación de conflictos y a los fenómenos climáticos. De hecho, más de la mitad de las personas con hambre (489 millones) vive en países golpeados por situaciones conflictivas.